Dia 4 en el West Coast Trail
Thursday, Sep 15
28630 steps = 15.46 km
Cribs
El recorrido de la mayoría del día fue por la playa, solo hubo un pequeño tramo de bosque y en total la distancia entre los campamentos fue de tan solo 6 kilómetros, en realidad fue un día corto, aunque hubo tramos de playa sobre grava y arena que lo hicieron un poco complicado; sin embargo, nada comparable a lo que habíamos recorrido en los días anteriores.
La pareja de padre e hija fueron muy madrugadores y para cuando nosotros nos habíamos levantado y estabamos organizando nuestro desayuno, ellos ya habían partido, los veríamos por la tarde en el siguiente campamento.
En nuestro recorrido, pasaríamos por lo que hace algunos años era un pequeño restaurante de playa, desafortunadamente la dueña falleció y aunque la hija intento continuar con el negocio al poco tiempo lo abandono, solo quedan los vestigios de la cabaña que en otros tiempos fuera el restaurante. Mi compañero nos platico la anécdota de que en una ocasión que caminaban por el lugar bajo una torrencial lluvia entraron al restaurante para resguardarse un poco y comer algo; sin embargo, al terminar de comer y tener que continuar con la caminata para alcanzar el siguiente campamento la lluvia no había cesado y en su grupo llevaban 2 niños menores de unos 12 años, así que se le ocurrió preguntar a la dueña que si les permitiría acampar a las afueras del restaurante para no tener que caminar hasta el campamento bajo la lluvia - en teoría no esta permitido acampar en ningún lugar que no este demarcado como zona de campamento ya que ahí se encuentra el acceso al agua dulce y los retretes. La señora, que era una habitante originaria, les dijo que de ninguna manera se iban a quedar a la intemperie, el restaurante cerraría en una hora y que eran bienvenidos a quedarse dentro del restaurante para que no se mojaran e inclusive podrían hacer uso de la cocina y alimentos disponibles si fuera necesario y que a la mañana siguiente harían cuentas, lo único que les pedia era que abandonaran el restaurante a las 8 de la mañana ya que a esa hora abrían para los excursionistas que quisieran desayunar - mi amigo no podía dar crédito de la bondad de la señora que les permitió acampar dentro del restaurante.
Una de las vistas mas lindas de la caminata de este día fue el faro de Carmanah, que contrario a la mayoría de los faros que se encuentran prácticamente sobre la playa, este esta un poco en lo alto de monte en medio del bosque, conforme íbamos caminando por la playa y nos íbamos acercando, cada vez se veía mas imponente e impactante. Mis fotos no son muy buenas, pero el espectáculo me pareció grandioso.
Es precisamente a la altura del faro en donde hay que entrar al bosque para cruzar al otro lado, no es posible pasar por el mar ya que hay un canal de flujo que es imposible cruzar a pie, independientemente del nivel de la marea. Así que nos adentramos por el bosque para hacer el cruce, fue precisamente en este tramo que nos encontramos con el grupo de americanos que habíamos conocido el día de la partida, ellos recorrerían el WCT en la dirección contraria a nosotros desde el lago Nitinaht hacia Port Renfrew. Se les veía muy cansados y haciendo un gran esfuerzo para avanzar por el bosque, ya no bromeaban como lo habían hecho en el camión y de hecho uno de ellos ya había desistido y regreso a Nitinaht para salir en camión. No se veía que estuvieran disfrutando mucho la excursión, nos comentaron que en el restaurante bebieron como si el mundo se fuera a acabar y que al pagar dijeron que solo tenían dólares americanos, mismos que por supuesto les tomaron pero a la par del dólar canadiense así que dejaron una propina del 25% mas o menos.
Uno de mis paisajes favoritos son estas formaciones de rocas que cuando la marea baja parecen estar en tierra firme mas cuando la marea sube, se convierten en pequeños islotes con dos o tres pinos en lo mas alto de las rocas. Hay una gran cantidad de estas formaciones y son muy características de la zona - me parecen de gran belleza.
Llegamos a Cribs que es una muy larga playa que en un extremo tiene un rio de agua dulce y enseguida el campamento con los baños y almacenes anti osos para guardar la comida, es un lugar en el que coinciden muchos excursionistas que viajan en el WCT en ambas direcciones, así que para la hora que llegamos ya había bastantes campamentos en pie, entre ellos el de la pareja de padre e hija que saludamos muy cordialmente y que estaban muy cómodamente en la playa tomando el sol. Nosotros decidimos de plano establecer nuestro campamento hasta el final de la playa muy alejados del resto de los excursionistas, de cualquier forma continuaríamos nuestra caminata en esa dirección y así evitaríamos la aglomeración de gente y grupos que después resultan ser un poco ruidosos por la tarde noche. El precio que pagaríamos es que tendríamos que ir hasta el rio por agua y después nuevamente para guardar los alimentos e ir al baño, en un principio no me pareció tan buena idea ya que el trayecto por la playa sobre la arena era bastante largo pero conforme fueron llegando excursionistas me quedo claro que era preferible estar mas aislados ya que había grupos realmente entusiastas que hacían mucho ruido y eso que no estaba permitido hacer fogatas por la sequía, de lo contrario las reuniones nocturnas se extienden aun mas y resultan bastante mas animadas. Así se veía desde nuestra posición el grupo de excursionistas acampados en el otro extremo de la playa.
Armamos nuestro campamento, fuimos a abastecernos de agua y a dejar nuestros alimentos en los almacenes anti-osos y al regresar nuevamente a donde estaban nuestras tiendas, nos percatamos que habíamos sido visitados por al menos un oso, no paso nada, nuestras pertenencias estaban intactas, pero si nos quedo claro que habíamos que andar con bastante cuidado y nunca dejar alimento en el campamento para evitar problemas.
El sol estaba en todo lo alto y no había sombra en el campamento, adaptamos la carpa que normalmente colocábamos en el suelo para poner el agua y los alimentos como un pequeño techo para poder resguardarnos del sol y poder descansar mas cómodamente. Fue la única ocasión en todo la excursión en la que tuvimos un poco tiempo libre y pude dedicar un tiempo a leer un poco, mi libro que no tenia nada que ver con excursionismo incluía la siguiente frase que aplicaba exactamente a la aventura que estaba viviendo en el WCT:
Y vaya que esta estaba siendo una aventura. Solo como referencia, el autor es Nassim Nicholas Taleb y el libro se llama "Skin in the Game".
Me llamo la atención lo acertado de la frase.
Para matar un poco mas de tiempo, fuimos a investigar que ruta seguiríamos el dia siguiente, había dos opciones, ir por la playa sobre las repisas, ese era el plan original o subir por el bosque por donde habíamos visto llegar bastantes grupos de excursionistas que viajaban en la dirección contraria a la nuestra. Nos preguntábamos si el camino por el bosque conectaría con la playa del otro lado, ya que prácticamente nadie estaba utilizando el camino de las repisas, pensamos que quizás no era accesible en ese punto y había que subir al bosque para mas adelante bajar a la playa. Despues de caminar unos 3 kilometros por el bosque concluimos que no había conexión con la playa, los excursionistas que llegaban por esta ruta no habían utilizado la playa debido a que la marea estaba alta y no era posible usar las repisas y había que caminar sobre la arena y grava, todo mundo evitaba a toda costa caminar por la arena y por eso usaban la ruta del bosque. Era pues de vital importancia sincronizarse correctamente con la marea baja al otro dia para poder caminar por la playa y no tener que subir al bosque. De regreso en el campamento y en nuestro camino a recoger nuestros alimentos de los almacenes anti-osos compartimos la información con la pareja de Padre e hija y les sugerimos definitivamente utilizar la playa al dia siguiente para facilitar su trayecto, acordaron que así lo harían y que nos verían en el siguiente campamento ya que planeaban salir muy temprano - iba a ser un dia largo y querían evitar caminar bajo el rayo del sol lo mas posible. También vimos a la pareja de alemanes nuevamente con quienes intercambiamos la misma información y recomendamos usar la playa.
A la mañana siguiente, muy temprano vimos iniciar el camino del Padre e hija por las repisas.